Tal como adelantamos en nuestro anterior post, el pasado día 12 de junio asistimos a la primera sesión de las Jornadas sobre Arte y Galerismo. En esta ocasión hubieron cinco ponentes: Albert Gran, presidente del Gremi de Galeries d’Art de Catalunya, Joan Anton Maragall, presidente de l’Associació de Galeries d’Art Contemporani Art Barcelona, Àngels de la Mota, en representación de l’Associació de Galeries Independents de Catalunya (la cual se ha fusionado con la anterior), Carme Espinet, presidenta de l’Associació Art Catalunya y Jaume Vidal, jefe de cultura del diario El Punt-Avui.
Todos ellos respondieron desde su punto de vista a las cuestiones planteadas en las Jornadas. A continuación haré un extracto-resumen de aquellas ideas que vale la pena destacar.
Se apuntó la necesidad de replantear el espacio de la galería, pasar a espacios menos costosos y más grandes, ubicados, por ejemplo, en naves industriales situadas en espacios periféricos de la ciudad, los cuales pudieran ser compartidos o no por distintas galerías. En todo caso, las galerías deberían ser de entrada más frecuente y con una comunicación más fluida, rica (importante para ello nuevas tecnologías) y dirigida a un mayor número de personas (con inclusión de las que tradicionalmente no se encuentran dentro del circuito del arte).
En el punto sobre la internacionalización de las galerías de arte se opinó que es una vía pero que en todo caso pasa por la necesidad de ayuda pública para poder participar en ferias, conocer otras galerías e instituciones. Sin alejarnos de conocer muy bien cuál debe ser el objetivo de la internacionalización por cuanto las galerías españolas se encuentran en la edad de piedra respecto del resto de galerías internacionales y ello conduce inevitablemente a que primero se deban plantear y adoptar cambios estructurales.
En cuanto a las ferias que existen actualmente en Barcelona, LOOP y SWAB, unos convinieron que no existe mercado en Barcelona para una feria de arte contemporáneo, otros, en cambio, opinaron que se deberían hacer crecer.
Una esperanza actual es reactivar el mercado interno. Que nuevamente el coleccionista de la burguesía del S. XIX se recupere (buscar en el profesional y en la pequeña y mediana empresa), todo y que se admitió que el mercado local está ahora mismo ausente, que se debe recuperar el mercado corporativo y que las galerías deben ofrecer una obra de calidad y programas atractivos.
Se debe mejorar el vínculo galerista-artista, fomentar el vínculo galerista-museo y galerista-ciudadano.
Y, por último, la imperiosa necesidad de un cambio legislativo en relación al IVA, Ley de Mecenazgo y Ley de Patrimonio Histórico. Por la parte que nos toca, obviamente, manifestar que estamos totalmente de acuerdo con dicha afirmación.
En el próximo post más conclusiones.